Buenos días a todos!!!!!!!!!!!!!!
Después de mi última entrada alla por el domingo pasado, hoy me gustaría retomar el blog hablandoos de una de las órdenes militares más importantes de España junto con la de Santiago, Montesa y Alcántara y no es otra que la de Calatrava, que no tiene nada que ver con el famoso arquitecto.
Escudo de la orden
Pues manos a la obra con la entrada de hoy y para ello vamos a comenzar con los antecedentes históricos de esta gran orden:
Fortaleza de Calatrava
La orden se remonta en sus orígenes al siglo XII, concretamente cuando la ciudad de Calatrava junto al río Guadiana (Provincia de Ciudad Real) es arrebatada por Alfonso VII de Castilla a los musulmanes en 1147, y debido a su importancia estratégica decide entregársela en 1150 a la orden del temple para su protección.
Pero(siempre hay un pero), ante el empuje musulmán, el temple decide entregar la fortaleza al sucesor de Alfonso VII, su hijo Sancho III, que ante ante este panorama y estampida de los del temple decide convocar a sus nobles y ofrecer Calatrava a quien quisiera hacer cargo de su protección.
Y será Fray Raimundo abad del monasterio Cistersciense de Fitero espoleado por el monje de su monasterio Diego Velázquez antiguo soldado de Alfonso VII los que se hagan cargo de la fortaleza de Calatrava, mediante donación real el 1 de enero de 1158 en la ciudad de Almazán.
Sancho III Raimundo de Fitero
Una vez ya conquistada Calatrava y con el paso de los años los caballeros calatravos decidieron que no querían seguir teniendo como superior a un abad del Císter, por lo que se nombró un nuevo maestre de la orden, retirándose los monjes a Ciruelos. El primer Maestre de la orden fue Don García que obtuvo del Císter y del Pontificado la primera regla por bula papal concedida por Alejandro III en el año de gracia de 1164.
Alejandro III
Esta regla, modelada sobre las costumbres cistercienses para hermanos laicos, impuso a los caballeros, además de las obligaciones de los tres votos religiosos (obediencia, castidad y pobreza), las de guardar silencio en el dormitorio, refectorio (comedor) y oratorio; ayunar cuatro días a la semana, dormir con su armadura, y llevar, como única vestimenta, el hábito blanco cisterciense con una sencilla cruz negra (luego roja, a partir del siglo XVI) «flordelisada»: una cruz griega con flores de lis en las puntas, que en el siglo XVI se configuró definitivamente como hoy se conoce.
La fortaleza de Zorita de los Canes y todo su alfoz fueron concedidas a los calatravos por Alfonso VIII en 1174, para proteger, tras dos años de incursiones de los almohades, toda la frontera este del Tajo. En abril de 1180 el mismo rey concedió fuero a Zorita.
Alfonso VIII
Desde su fundación hasta principios del siglo XIII la Orden experimentó una serie de altibajos. Tras la derrota cristiana sufrida por Alfonso VIII en la Batalla de Alarcos(1195), incluso tuvo que evacuar sus posesiones y retirarse a Ciruelos(Toledo). Tras un golpe de mano, varios caballeros de la Orden tomaron por sorpresa el Castillo de Salvatierra, casi a las puertas de Sierra Morena, que mantuvieron en su poder, totalmente aislado de socorros, hasta 1211. Por ello, durante esos pocos años, la Orden adoptó el nombre de Orden de Salvatierra.
Batalla de Alarcos Castillo de Salvatierra
La Dehesa de Abenójar y su término fueron concedidos en 1183 por Alfonso VIII a esta orden y hasta 1814 —que el término fue recuperado por el Infante Don Carlos— el pueblo pasó a llamarse Abenójar de Calatrava. Como constancia de este hecho, se puede ver la Cruz de Calatrava realizada en forja en uno de los tejados de la iglesia del pueblo.
La Orden alcanzó su afianzamiento definitivo tras la Batalla de las Navas de Tolosa(1212), cuando fijó su sede en la nueva y más segura fortaleza de Calatrava la Nueva(1218) (en el antiguo Castillo de Dueñas, frente del castillo de Salvatierra), que fue construida por prisioneros musulmanes en su mayor parte, y que ya nunca abandonaría.
Calatrava la Nueva Las Navas de Tolosa
La antigua sede de Calatrava, origen de la Orden, junto al río Guadiana, pasó a convertirse en la sede de una encomienda, y desde ese momento pasó a ser conocida como Calatrava la Vieja.
Calatrava la Vieja
En poco tiempo, sus grandes recursos humanos y económicos dieron a la Orden un enorme poder político y militar, que duró hasta el final de la Reconquista. Disponía de tierras y castillos a lo largo de toda la frontera de Castilla y Aragón, ejercitando un señorío feudal sobre miles de vasallos. Era capaz de aportar, a título individual, hasta 2000 caballeros al campo de batalla, una fuerza considerable en la Edad Media. Además, disfrutaba de autonomía, lo cual trajo consigo diversos enfrentamientos con los reyes, dado que la Orden no les obedecía a ellos, sino al Maestre. Sólo se reconocían superiores espirituales: el abad de Morimond (Francia) y, en último término, el Papa.
A partir del año 1228 la Orden de la Calatrava pasó a contar con encomiendas en Andalucía tras serle concedidas por el rey Fernando III apodado el santo, las plazas de Martos, (Higuera de Calatrava (antigua de Martos)), Porcuna, Víboras y Alcaudete, en agradecimiento por los servicios prestados en la Reconquista. Asimismo a lo largo de los siglos XIV y XV, los calatravos fueron extendiendo sus dominios andaluces con la creación de nuevas encomiendas en Jaén (Lopera, Jimena, Arjona, etc.), Córdoba (Fuenteovejuna, Belmez , Villafranca de Córdoba, etc.) y Sevilla.
Fernando III el Santo
Fernando el Católico logró ser elegido Maestre de la Orden en 1487 por una bula papal, y a partir de él todos los reyes de España revalidaron el título.
Fernando el Católico
Bajo el mando de los sucesivos monarcas, y con la reconquista de la península finalizada, gradualmente fueron desapareciendo tanto el espíritu militar como el religioso. Con el tiempo, su única razón de existir era la generación de ingresos, procedentes de sus grandes dominios, y la conservación de sus reliquias.
Confiscados los bienes de la Orden por disposición de José I Bonaparte, llamado amigablemente por los españoles "Pepe Botella" en 1808, fueron restituidos en 1814 por Fernando VII, el supuesto "deseado", para acabar definitivamente secularizados en 1855 por Pascual Madoz. La Primera República española suprimió la Orden, que se restableció en 1875 con el Papado como encargado de regular su disciplina interna. En la actualidad, la orden es una institución honorífica.
Pascual Madoz Fernando VII José I Bonaparte
Y para terminar me gustaría poneros fotografías de los hábitos de la orden tanto de la rama masculina como femenina del siglo XVIII para que os hagais una idea de como vestían, los he sacado de un libro francés de la época titulado Histoire des Ordres Monastiques, Religieux et Militaires escrito en París por Nicolás Gosselin en el año de gracia de 1714.
Histoire des Ordres Monastiques, Religieux et Militaires
Aquí os las dejo para que las disfrutéis!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
Religiosa de Calatrava Caballero de Calatrava Hábito de Ceremonia
Y como no hablaros también de las dignidades de la orden:
- Maestre: autoridad suprema de la Orden. Otorgaba las encomiendas, confería hábitos y prioratos, administraba justicia a todas las personas pertenecientes a la Orden, vasallos incluidos. El cargo era electivo y vitalicio. La Orden tuvo un total de 30 Maestres hasta la fecha de unión con la Corona española.
- Comendadores mayores de Castilla y Aragón: primeras autoridades, después del maestre, en las encomiendas de sus respectivos reinos.
- Clavero: su misión era guardar y defender el castillo y convento mayor de la Orden, es decir, su sede de Calatrava la Nueva. También era lugarteniente del maestre.
- Prior: encargado de la cura espiritual de los caballeros. Representaba al abad de Morimond.
- Sacristán: encargado de la custodia de las reliquias de la Orden, vasos sagrados y ornamentos.
- Obrero mayor: encargado de las construcciones.
Un saludo a tod@s !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!
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